Descripción general

Las convulsiones del lóbulo frontal son un tipo frecuente de epilepsia. La epilepsia es un trastorno del cerebro en el que grupos de neuronas cerebrales envían una descarga de señales eléctricas. Esto causa movimientos que no se pueden controlar, conocidos como convulsiones. Estas convulsiones comienzan en la parte delantera del cerebro, que es la zona llamada lóbulo frontal.

El lóbulo frontal es grande y tiene funciones importantes. Por este motivo, las convulsiones del lóbulo frontal quizás ocasionen síntomas inusuales y pueden parecer relacionados con una enfermedad mental. Además, las convulsiones pueden confundirse con un trastorno del sueño, ya que suelen ocurrir mientras se duerme. Este tipo de convulsiones también reciben el nombre de epilepsia del lóbulo frontal.

Los cambios en el tejido cerebral, una infección, una lesión, un accidente cerebrovascular, tumores u otras afecciones pueden causar convulsiones del lóbulo frontal.

Los medicamentos pueden ayudar a controlarlas. La cirugía o la estimulación eléctrica podrían ser opciones si los medicamentos no reducen ni detienen las convulsiones.

Síntomas

Las convulsiones del lóbulo frontal a menudo duran menos de 30 segundos. En algunos casos, la recuperación es inmediata.

Los síntomas de las convulsiones del lóbulo frontal podrían incluir:

  • Movimiento de la cabeza y de los ojos hacia un lado.
  • No responder a los demás o tener problemas para hablar.
  • Gritos explosivos, incluidas blasfemias, o risas.
  • Postura corporal. Una postura común es extender un brazo mientras el otro se flexiona, como si la persona estuviera en pose de esgrima.
  • Movimientos repetitivos. Estos pueden incluir balancearse, pedalear en bicicleta o basculación de la pelvis.

Cuándo debes consultar con un médico

Consulta a un profesional de atención médica si tienes síntomas de una convulsión. Llama al 911 o a un servicio de ayuda médica de emergencia si observas que alguien tiene una convulsión que dura más de cinco minutos.

Causas

Las convulsiones del lóbulo frontal pueden deberse a tumores, accidentes cerebrovasculares, infecciones o lesiones traumáticas en los lóbulos frontales del cerebro.

Las convulsiones del lóbulo frontal también están asociadas con un trastorno hereditario poco frecuente llamado epilepsia del lóbulo frontal autosómica dominante nocturna. Este tipo de epilepsia causa convulsiones breves durante el sueño. Si tu padre o madre tiene este tipo de epilepsia, tienes un 50 % de probabilidades de heredar este trastorno.

En aproximadamente la mitad de las personas que tienen epilepsia del lóbulo frontal, se desconoce la causa.

Factores de riesgo

Los factores de riesgo de convulsiones del lóbulo frontal incluyen:

  • Antecedentes familiares de convulsiones o trastornos cerebrales.
  • Traumatismo craneal.
  • Infección en el cerebro.
  • Tumores cerebrales.
  • Vasos sanguíneos o tejidos del cerebro que se forman de manera irregular.
  • Accidente cerebrovascular.

Complicaciones

Las convulsiones del lóbulo frontal pueden causar complicaciones como:

  • Convulsiones que duran mucho tiempo. Las convulsiones del lóbulo frontal tienden a ocurrir en grupo. Por este motivo, pueden generar una afección en la cual la actividad de la convulsión dura mucho más de lo normal, lo que se conoce como estatus epiléptico. Si las convulsiones continúan, pueden causar daño cerebral permanente o la muerte.

    Las convulsiones que duran más de cinco minutos son una emergencia médica. Llama al 911 u obtén asistencia médica de inmediato si ves a alguien tener convulsiones por más de cinco minutos.

  • Lesiones. Los movimientos que ocurren durante las convulsiones del lóbulo frontal algunas veces dan lugar a lesiones en la persona que tiene la convulsión. Las convulsiones pueden derivar en accidentes y ahogamiento si ocurren en determinadas situaciones, como al conducir o nadar.
  • Muerte súbita e inesperada en epilepsia. Las personas que tienen convulsiones tienen un riesgo mayor que la media de morir repentinamente. Las razones de esto no se conocen. Los posibles factores incluyen problemas cardíacos o respiratorios, tal vez relacionados con cambios genéticos. Controlar las convulsiones lo mejor posible con medicamentos parece ser la mejor forma de prevenir la muerte súbita e inesperada en epilepsia.
  • Depresión y ansiedad. Ambas afecciones son comunes en personas con epilepsia. Los niños también tienen un mayor riesgo de desarrollar un trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).